Características de vino

Vinos tintos
Los tintos son procesados a partir de la gran diversidad de uvas tintas que a través de su piel le dan color al vino y le aportan diferentes compuestos, esenciales en la composición del vino ya que le aportan su textura particular. Estos compuestos le dan al vino su solidez, ese carácter persistente en la boca cuando se bebe, y cuando más joven es el vino, mayor es su consistencia. A medida que el vino se va madurando, la firmeza se va suavizando, dando lugar así al desarrollo de otras características más complejas en el sabor del vino.
VINO BLANCO
El vino blanco es aquel que se elabora a partir de mostos de uva blanca, o tinta no coloreada. Aunque existen numerosas variantes y detalles propios de cada zona y estilo de vino, como principio general, la elaboración en blanco, supone que la fermentación del mosto se realiza sin la presencia de los hollejos (pieles)
Vino blanco con carácter, de gran cuerpo y volumen, equilibrada acidez, elevada graduación y característico final de boca amargo, que le aporta persistencia y elegancia.
Como anécdota hay un estudio realizado en la Universidad de Connecticut desveló que beber una o dos copas de vino blanco al día reduce las secuelas que puede dejar un paro cardiaco.
VINO ROSADO
Muchos Piensan que la calidad del vino rosado es inferior al del tinto o el blanco. Pero la gran versatilidad que da una copa de rosado en gran variedad de platos, hacen del rosado de el un gran vino para el maridaje de cualquier aperitivo.
Una de las formas de elaborar el rosado hoy en día, es un vino blanco procedente de uvas tintas. Teñido por el aporte de antocianos, compuesto fenólico de color rojo que se encuentra en el hollejo y cuya concentración depende del grado de maduración de la uva.